
Antes de nada, yo no soy escritora solo narro esta historia para que todos se enteren de que paso, y que nadie le pase.
Todas las maletas apunto y metidas en el coche, toda la familia a punto de irse, todos juntos. ¿A dónde? pues pensaba que sería un lugar precioso, en las afueras de un pueblo pequeño, una casa sacada de un cuento de hadas, vallas blancas, un pequeño huerto y por el otro lado un columpio y flores por donde veas, en mitad de un bosque, entre montañas. Ahí vamos a disfrutar todos juntos en un lugar neutro.
Las disputas familiares habían sido agotadoras todo el año no solo era momento de celebrar todos juntos fin de año sino también para reconciliarnos.
Tres hermanos, dos hermanas. Juntamente a sus esposas y maridos, en total somos 9.
Quedamos directamente ahí, algunos van con avión, otros en coche.
Después de ese largo camino, después de horas, por fin llegamos.
Madre mía, jamás pensé que realmente se veía así, no estaba ni el huerto, ni las flores, no había nada que se apreciara en la foto, las vallas estaban abandonadas descolorido, y tenía la sensación que como tocase me estallaría.
Entremos, nos sentamos en el sofá mientras mi cuñada encendía el fuego con mi hermano. Mi hermana me llamaba desde la cocina, traemos bebidas y bolsas de patatas. Una hora más tarde los últimos en llegar mi hermano y mis cuñadas. Estupendo estamos ya todos.
Dentro de un bol pusimos las habitaciones numeradas.
Llego el momento de instalarse. es una habitación bastante antigua para mi gusto. Seis habitaciones. Sobra una.
Todas las miramos y tenían cuadros extraños, crucifijos a todos lados, más que una casa de cuento de hadas parecía una casa creada para Halloween.
Empezamos preparando algo de comer, medio día y las tripas resuenan en el ambiente.
Todos sentados, risas, por un lado, malas caras por otros.
Ya está bien. Venimos a disfrutar y reunirnos como familia.
Mientras comemos hacemos planes de que hacer, unos juegos de mesa, películas, una serie que empezar, o nos emborrachamos.
Mi hermano, después de comer se enciendo su porrillo huele demasiado bien pero también huele mal.
Sin embargo, lo primero hacer es recoger, ventilar, y quitar las sábanas que aún quedan por algunos muebles.
Limpiando encontramos una puerta en lo alto del techo del piso de arriba. Hay unas golfas.
Mi hermano y mi hermana se miraron, es hora de investigar. No es necesario para que la curiosidad. Soy demasiada asustadiza y odio las arañas. Pero como no hicimos lo que ellos decían, abrimos y un aire putrefacto salió de ahí... subimos las escleras que salieron al abrirlo, dobladas, como en las películas americanas. Subieron ellos, y yo la última.
Encendieron la luz, y se veía muebles viejos, cajas, y algún que otro cuadro, incluso azulejos, o parque, es un trastero sin más.
Volvimos a la casa, o al menos yo no tarde mucho en bajad.
Al terminar de limpiar y de descubrir la casa, decidimos bajad, ya era por la tarde... Todos reunidos en aquel salón bastante grande y reconfortante.
Mi hermana quiso jugar a verdad o reto, juegos de mesa, y mucho más. Nada más empezar el juego me miraron, tranquila esto no es una película, no pasara no tengas miedo, si quieres no jugamos, no paraban de repetir así que cansada de ser siempre la miedosa dije, vamos juguemos, si eso queréis, empezar, mi enfado podía más que mi miedo, ahora lo pienso mientras lo escribo y no se para que jugamos, claro todo iba bien hasta que le toco a mi cuñada, verdad, y ahí fue donde la guerra se desato, su verdad no solo enfureció a mi hermano y a mi hermana, resulta que tenía un amante, no sé si estaba ebria o no, me la cago diciéndolo delante de todos que estaba cansado de mi hermano... Cogió se fue a la habitación y cerro de un portazo. Ahí la casa retumbo, y un cuadro se descolgó después de ese portazo. Un sobre cayó al suelo.
Había una carta y una foto, todos curiosos empezó a leerla mi hermana:
"No sé si esta casa seguirá mucho tiempo más en pie, pero de ser así y alguien viene a vivir, tener cuidado esta casa las paredes oyen, se aprovechan de las debilidades, y de las emociones, perdí a mi familia, y yo me voy a quitar la vida, esta casa, es una maldición que tortura todas las noches...
Iros de aquí u os arrepentiréis"
5 de marzo de 1983
Vaya todos empezaron a burlarse y a mí el miedo me devoraba me sonreía.
Dejamos el cuadro bien puesto y mu cuñada después de guardar la foto y la carta la puso encima de un mueble, nadie se lo creyó. A veces siento que nadie comprende lo que siento con este miedo.
EN fin, empezamos hacer la cena, pusimos una película de comedia, esta vez elegí yo.
Vimos la película y esperamos que fueran las 12, empezaron las copas, las uvas y música mientras esperamos, al fin llego el momento, la boca llena, nuevo año, felicitaciones, y abrazos, esto ya es más reconfortante. Las dos de la mañana algo ebrios nos vamos a la cama, el silencio se podía hasta respirar, a punto de quedarme dormida y de repente escuche un ruido, mi hermano gastando bromas, enfada grite vete a dormir y deja de molestar.
De repente medio tapada con el pie salido de la sabana, pude notar como alguien tiraba de él, miré a mi alrededor, pero no había nada.
Fui a la habitación del lado, mi cuñada estaba sola, dormida, otra habitación, entre y no tenía por qué entrar, no fue una buena idea, cerré despacio como si nada hubiera pasado, ver eso con mi hermano y mi cuñado, no podía ser, el miedo se fue, un nuevo trauma.
Volví a probar con otra habitación, mi hermano, solo, por fin aun despierto mirando el móvil con los auriculares. Le cuento que tengo miedo y lo que he sentido, me dice que he visto muchas películas y que de seguro lo he soñado. Le pedí quedarme y acepto me tumbe a su lado.
Pero a los 10 minutos, un grito nos hizo que nos mirásemos los dos. salieron todos de las habitaciones desde lo alto del piso de arriba nos miramos todos, nos asomamos hacia el piso de arriba, algunos mirando `por la escalera y otros miramos desde lo alto de la valla de madera, una sombra recorrida el salón, y todos empezamos asustarnos. ¿Qué ha sido eso?
De repente unos pasos se acercaban por la escalera, pero no se veía absolutamente nada, yo miedosa, encendí la luz y los pasos dejaron de sentirse.
Eso es lo que tiene saber tanto del tema, la luz ahuyenta las cosas tan siniestras que ocurren en la oscuridad.
Todos me miraron, ha sido cosa tuya verdad decían y empezaron a sugerir la idea de que quería hacerles pasar por miedo por leer esa carta, no en absoluto no tenía ganas de sentir yo también miedo.
Dejé la luz encendida incluso de la habitación pude dormir tranquilamente.
Pero al despertar baje a preparar el café, falta mi cuñada, ¿Dónde estará?
La habitación está vacía pero la maleta esta aquí.
Abra salida a tomar el aire. No puede irse no llegan buses ni ningún transporte.
Después de tres horas, salimos a buscarla, gritamos, pero no respondía, al final tuvimos que volver, por fin de tono a su móvil, se sentía en la parte de abajo de la casa, no podía ser.
Buscamos y buscamos, pero no había forma de poder entrar...
por fin después de horas encontramos una trampilla de abajo de la alfombra.
Abrimos y todo estaba oscuro, cogimos alguna linterna, pero yo no soy de linternas vi una lampara antigua, y la cogí la encendí con el mechero, al bajar todos ahí las linternas empezaron a desvanecer su luz, la mía aun seguía, encendida así que todos se acercaron a mí, la verdad es reconfortante, sentirlos, me siento más segura a mesar del miedo y sus escalofríos. Ahí está dijo mi hermano, tumbada en suelo, intentamos despertarla, pero fue en vano. La luz de las linternas volvió, y ellos empezaron a mirar por los lados, a ver que había en ese lugar, había recuerdos, fotografías, había más cuadros, ropa, pinturas, pero también había cadenas, y de repente todos nos asustamos, dos cadáveres ahí expuestos, cogimos a mi cuñada y regresamos a la casa.
Mi hermana cogió el diario, es lectora y escritora y eso es una historia para ella, se puso a leerlo y hablaba de torturas, de dolor, de espíritus y de suicidio.
Todos con el miedo en el cuerpo, pusimos colchones en el suelo y decidimos pasar la noche juntos, ese fue el principio de todo mal.
Continuara...
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